La comunicación corporativa va mucho más allá de la información que facilitamos a agentes externos sobre nuestra organización. Las empresas que han entendido que la comunicación está presente en todas y cada una de las acciones empresariales y que es reflejo, tanto interno como externo, de la identidad empresarial, han encontrado en la comunicación corporativa un aliado potente en el trabajo diario para lograr sus objetivos estratégicos.
La confianza en el Dircom, fundamental
Un buen Departamento de Comunicación debe contar con la confianza (de la dirección) y los recursos necesarios que permitan a la empresa desarrollar una voz propia y construir un discurso corporativo coherente y distintivo que la posicione como líder y le permita generar contenido y entablar diálogos con su sector, su audiencia objetivo y la sociedad en general.
Es cierto que el camino hacia el convencimiento de que la comunicación es un eje estratégico importante en toda organización puede tardar en llegar. De hecho, es el caballo de batalla diario de muchos Dircoms que hacen lo que pueden, limitados por la falta de confianza sincera de sus CEOS.
Y así, con frecuencia las empresas proporcionan información, pero no logran una verdadera comunicación.
La comunicación corporativa es esencial para el éxito de cualquier proyecto empresarial, ya que influye en clientes, socios, colaboradores y empleados, tanto actuales como futuros.
La comunicación real y efectiva pasa por la escucha activa de todas y cada una de las personas que en mayor o menor grado tienen contacto con la marca: trabajadores, proveedores, clientes, grupos de interés…es fundamental escuchar sus opiniones y conectar emocionalmente con ellas. Se trata de ir más allá de los datos y las cifras; el objetivo final es lograr afianzar un relato corporativo sólido y congruente. Que identifique. Y que conecte.
En un tejido empresarial como el español, eminentemente conformado por pymes, uno de los mayores riesgos de la comunicación corporativa es pensar que este es solo es relevante para las grandes organizaciones. Nada más lejos de la realidad: la comunicación corporativa es esencial para el éxito de cualquier proyecto empresarial, ya que influye en clientes, socios, colaboradores y empleados, tanto actuales como futuros.
Pero, ¿realmente es tan difícil?
Desde Lobby te ofrecemos cinco imprescindibles para lograr una comunicación corporativa eficaz:
1. Definir bien el propósito corporativo y darlo a conocer a todos los integrantes de la organización: cuál es nuestra razón de ser, hacia dónde vamos y cómo lo vamos a conseguir.
2. Monitorizar exhaustivamente nuestra reputación: no puede existir una brecha entre lo que decimos que somos y lo que el mundo piensa o dice que somos.
3. Ser coherentes: al hilo de lo anterior…es tan sencillo como la educación de nuestros hijos: las palabras no educan, el ejemplo sí. Las caras visibles de la empresa deben ser coherentes y respaldar el propósito corporativo.
4. Fomentar un discurso corporativo compartido que fortalezca la organización. Una vez que se haya encontrado la voz propia a través de un propósito corporativo sólido, es crucial incorporarla en toda la organización para impulsar su crecimiento de manera coherente. La comunicación corporativa debe reflejar la transparencia y la responsabilidad social, especialmente en un mundo donde las nuevas generaciones exigen un mayor compromiso y autenticidad.
5. Generar y compartir conocimiento de manera abierta: superar el temor a crear contenido y compartir conocimiento es esencial. La capacidad de agregar valor a través de los contenidos es fundamental para desarrollar una voz propia que nos identifique. Los contenidos deben ser ricos, veraces, transparentes y enfocados a la relación directa con los públicos, en lugar de estar orientados exclusivamente a la venta o promoción de la empresa y sus productos.
6. Fomentar el diálogo y ampliar la interlocución: las estrategias de comunicación corporativa deben adaptarse a la inmediatez y democratización de las audiencias en la era digital. Esto implica abrir oportunidades para que distintos miembros del equipo, no solo el presidente o el director general, participen en la comunicación corporativa. Algunas empresas ya están delegando funciones de comunicación en expertos y miembros del equipo que generan contenido y conocimiento.
7. Los empleados también son comunicación corporativa: cada una de las personas que conforman el equipo de una organización son sus mejores embajadores de marca. Son quienes más la conocen pues dedican más tiempo a la organización que a cualquier otra actividad. Potenciar su orgullo de pertenencia y transmitirles su papel fundamental en la comunicación corporativa de la empresa puede ser una potente herramienta de comunicación.
En definitiva, lograr una comunicación corporativa brillante pasa por que todos y cada uno de los agentes y acciones en contacto con la marca se alineen con un propósito corporativo bien definido. Para ello es indispensable el convencimiento de la dirección sobre la necesidad de incluir la comunicación entre los ejes estratégicos de la compañía.
