Eva Escamilla es licenciada en Bellas Artes por la Facultad de San Carlos de Valencia, en la especialidad de Dibujo y Diseño. En 2013 organizó las I Jornadas de Moda Sostenible en Valencia.
Creadora de la primera tienda taller en España especializada en pintura sobre seda. www.ensedarte.com
Con esta iniciativa, Eva Escamilla ha recuperado la figura del artista especializado en flores y ornatos, tan importantes en la etapa de esplendor de la seda valenciana del siglo XVIII, que alimentaba a la industria sedera con motivos para sus tejidos.
El proyecto de “Valencia en Seda” y las colecciones textiles de Eva Escamilla fueron finalistas de los Premios Artesanía Comunitat Valenciana durante los años 2015/2017, en la categoría “Artesanía de Vanguardia”, ya que sus creaciones cumplen el requisito de incentivar la creación artesanal, la innovación, el compromiso con un desarrollo sostenible y su adaptación a las tendencias del mercado.
En tu trayectoria como diseñadora, artesana textil y emprendedora, ¿qué ventajas e inconvenientes has encontrado por el hecho de ser mujer?
No he encontrado ninguna dificultad o ventaja especial. En mi mundo hay muchas mujeres creativas, en cualquiera de los ámbitos en los que he trabajado.
Hay una cierta tendencia paternalista, protectora por parte de los hombres quizá porque confunden creatividad y sensibilidad con fragilidad.
Retos que debemos conseguir para lograr una igualdad real.
Dejar de tener en cuenta si somos hombres o mujeres a la hora de seleccionar trabajadores, ver tan solo personas cualificadas con las que empatizamos. Y en las labores de crianza y convivencia paternales, lograr que sea al 50% en la empresa de modo que no se discrimine a las mujeres en edad de gestación
¿Qué mujer ha sido tu referente o la inspiración en tu vida?
Cuando tenia 20 años leí un libro sobre mujeres aventureras, que viajaron solas a países con religiones y costumbres radicalmente diferentes en siglos pasados, como por ejemplo Alexandra David Neel y ellas han estado siempre en mi pensamiento. Si en su época fueron capaces que no podemos hacer ahora.
¿Cuáles serían tus propuestas para conciliar la vida maternal y laboral?
En mi caso que soy autónoma, artesana y emprendedora, sería muy útil poder contar con ayuda unas horas al día de trabajadoras mayores de 50 años paradas que tienen más disponibilidad porque sus hijos son más mayores, en algún formato subvencionado por el Estado, que fomentara el empleo por ambas partes.
Las mujeres en mi situación, muchas veces no pueden contratar de forma estable y es todo muy complicado formalmente.
Muchas gracias Eva por contarnos tu experiencia!